miércoles, 5 de marzo de 2008

INFLACIONAR O MORIR


No hace muchos días un cliente me planteó una pregunta: “Si los precios de las acciones suben y bajan cíclicamente, porque los precios de los bienes de consumo, o lo que es lo mismo, la inflación sube continuamente y nunca entra en ciclos bajistas como lo hacen las acciones?”

Primero, tendríamos que comprender bien lo que es la inflación.
Es la creación de nuevos billetes de banco puestos en circulación, como consecuencia del endeudamiento de los gobiernos, de las sociedades y de los hogares. Este flujo enorme de moneda suplementaria busca sin parar un lugar adecuado para ser colocado.

Es como si se tratara de una enorme ola de agua que busca un pozo muy profundo en el cual meterse. Si todo el agua va al mismo pozo, el nivel de agua sube regularmente en ese lugar (Alza de los precios en ese sector). Si el pozo recibe demasiada agua, el pozo explota y la ola se retira (Bajada de precios en ese sector) para ir a buscar otro pozo mas grande y mas sólido.

Esta imagen refleja adecuadamente lo que ocurrió en los años 70, cuando la economía no iba demasiado bien. Los capitales salieron del mercado de las acciones para ir a refugiarse en las materias primas y los metales preciosos.
Los que no siguieron el movimiento de la ola, perdieron dinero, ya que el nivel de agua en el “pozo” de las acciones tradicionales bajó, y aquellos que guardaron algunas vieron como el precio de las mismas bajaba durante un periodo de 10 años.

Paralelamente, el agua hizo subir el nivel del “pozo” de las materias primas y los metales preciosos. Cuanto más estrecho es el pozo, más rápidamente sube el nivel de agua. El pozo de las acciones y obligaciones es muy amplio y puede acoger mucha agua (capitales), en cambio el de los metales preciosos es mucho mas estrecho.
El precio del oro se multiplicó por 20 en sólo 10 años.

En la década de los 80 el pozo de las materias primas y de los metales preciosos reventó y el agua se fue al mercado de acciones nipón. Aquellos que compraron acciones de empresas japonesas en 1980 y que las revendieron en 1990 amasaron una pequeña fortuna!!.
Posteriormente el agua salió del mercado japonés, y esta fuga podría durar aún unos años mas.

Se formó en Japón lo que se conoce como una burbuja: el agua no sabía donde meterse, la gente se precipitaba a comprar empresas y activos inmobiliarios en Japón, y los pozos en lugar de reventar se hincharon desmesuradamente. Los precios de los activos inmobiliarios alcanzaron niveles alucinantes en 1990. Llegó el crash bursátil, y la burbuja (llena de agua) reventó y el agua buscó un nuevo pozo dónde alojarse.

Y el nuevo pozo que encontró el agua desbordada en la década de los 90 fueron las acciones de las sociedades tecnológicas, internet y telefonía. Los precios subieron tanto que de nuevo se formó una burbuja en el año 2000.

Durante este periodo los productores de oro y de materias primas sufrían terriblemente con los bajos precios porqué el agua que quedaba en esos pozos salía atraída por la irresistible burbuja de las acciones tecnológicas, internet y telefonía. La burbuja a su vez explotó y el agua desbordó de nuevo.

La inflación no hacía subir todos los precios al mismo tiempo. Había siempre un sector que sacaba partido del flujo de la moneda a expensas de otro.

Hoy los gobiernos han creado tal cantidad de moneda, que todos los sectores se hallan anegados de agua (El caudal de agua (= cantidad de moneda) en circulación, aumenta anualmente una media del 7,8% desde 1950).

Hay bienes caros que en el futuro van a ser mas baratos, y otros que van a ser aún mas caros.

Algunos economistas creen que la deuda será devuelta algún día y que por lo tanto la cantidad de moneda en circulación disminuirá creando una deflación.

Desde que la moneda ya no está cubierta por el oro, creo que eso no tiene muchas posibilidades de ocurrir, ya que los gobiernos tienen tal deuda que su única salida es inflacionar continuadamente.

Aún cuando haya que pagar altos intereses sobre la deuda, la inflación permite aligerar su peso a expensas de los prestadores (aquellos que prestan el dinero, normalmente los ahorradores) dado que los tipos de interés son casi siempre mas bajos que las tasas de inflación, y los ajustes de los bancos centrales en materia de tipos de interés llegan siempre después de conocerse los datos sobre la inflación.

El actual modelo económico favorece al que se endeuda en detrimento del ahorrador. La economía es pues estimulada constantemente destruyendo el valor de la moneda. El objetivo de los gobiernos es mantener indefinidamente una inflación controlada y evitar encarecidamente que la economía entre en deflación.

El motivo es porqué aún cuando puede parecer que un periodo de deflación sería conveniente para la gran mayoría de hogares puesto que todo sería mas barato, en realidad la deflación es la gran destructora de la economía.

Entendemos por deflación la bajada continuada y generalizada de los precios de energías, bienes de consumo, materias primas etc.

Si sabemos que todo va a ser mas barato el año que viene, ¿porque vamos a comprar este año?

Como consecuencia de esta cuestión tan evidente, el consumo bajará inevitablemente y afectará directamente a la economía de las empresas y al mercado de valores que se basa en expectativas.

Como las empresas facturaran menos y obtendrán menores resultados tendrán que reajustar sus plantillas con lo cual el paro aumentará, si el paro aumenta como pagaran los hogares sus deudas y hipotecas?

A partir de este momento podría empezar una reacción en cadena, un dominó que podría hacer entrar todo el sistema económico en una crisis como las que ya no se ven desde los años treinta.

Dado que los hogares actuales ya no ahorran, no existirá ese rinconcito al que recurrir cuando no haya entradas, con lo cual muchos hogares van a encontrarse en quiebra, que llevarían a la quiebra a las empresas e incluso a bancos. Si el sistema bancario se resquebraja, podría llegar una crisis monetaria y arruinar el precio del dinero.

Por este motivo los gobiernos quieren una inflación controlada pero continuada y se hallan ante la disyuntiva de inflacionar o morir.

No veis con otros ojos los datos del I.P.C?

1 comentario:

Anónimo dijo...

Muy simpática la metáfora del agua.

Yo me pregunto, porque siempre tiene que "crecer" la economia? Y si no crece lo suficiente las cosas van mal?
Yo pienso que tiene que ver con el aumento de la población. Si hay mas personas aumenta la demanda de productos-servicios para esas personas, etc ... pero si lo comparamos con las colonias de bacterias en un medio limitado (eso somos nosotros bacterias en un capsula de pettri llamada tierra), es fácil ver que no se puede crecer indefinidamente ya que se acaban los recursos.
La única solución a largo plazo es la estabilidad (de precios, de población, etc)... bueno, otra opción son las oscilaciones (ciclos de crecimiento y decrecimiento) pero eso parece mas traumático.

Podría funcionar de alguna manera la inflacion cero?